Marco...

Marco era un joven abogado, inteligente, ordenado, apasionado por su trabajo, le gustaba viajar y saber el porque de las cosas. Unos días ante de su cumpleaños compró una enorme casa antigua en el centro de la cuidad. Ordenó todo y dejó acondicionada una gran sala para la fiesta que daría en unas horas. Dió un vistazo a toda la casa, pensando en las personas que en el pasado vivían ahí; recordó a un famoso coronel del que construyó un túnel para escapar con su amante. !Como había olvidado eso! estas casas viejas tienen pasajes secretos, áticos, sótanos, tenía que encontrar la entrada a alguno de ellos. Después de buscar, vió que en la cocina había una puerta en el piso, con una chapa muy antigua. Marco movido por su curiosidad de investigador descendió hasta el oscuro sótano. Ahí había muchos muebles viejos, cuadros, cortinas, baúles, candelabros y algunos libros. Hombre amante de la lectura se puso a curiosear los libros, los ojeaba como un niño desesperado por un regalo de navidad.
Un libro en particular le llamo la atención, un libro con cubierta de piel negra, lo tomo y leyó el titulo: “Marco Contreras, historia de una vida”…
¿Quién le había jugado semejante broma? ¿Su padre? ¿Almendra? No podía ser, maldita chaparra, como lo había hecho parecer tan auténtico. Marco comenzó a leer el libro. No podía creerlo, cosas que no recordaba venían escritas a detalle en ese libro, ¿Cómo era posible?
Conforme avanzaba mas intrigado estaba. Secretos, pensamientos que solo el sabía. Marco avanzó hasta las últimas páginas, leyó como había desempacado, y lo que recordó del general, la puerta del sótano, el libro con cubierta negra con su nombre. No podía dar crédito a lo que leía. Cerró el libro, pensó un momento, acarició la idea de saber que pasaría con su futuro.
Tomó el libro y leyó: Marco sintió curiosidad de saber su futuro, así que volvió a tomar el libro, pero no sabía que mientras el leía, una sombra, la sombra del destino caminaba lentamente hasta el, Marco se estremeció, y vió como la sombra tomaba con su mano huesuda su corazón, lo presionó hasta que estalló en pedazo dentro de su ser. Marco yacía sin vida en el suelo.
El destino tomó el libro y lo puso en su lugar. Ahora tendría que esperar hasta que otra persona curiosa, llegara a leerlo. La curiosidad puede llevarte a la muerte. ¡Feliz Cumpleaños Marco!