El Ahorcado

Todo empezó en una noche oscura, con el cielo totalmente despejado, la luna se filtraba por cada rincón de la casa. Mario estaba a punto de irse a dormir, pero primero decidió pasar al baño, total mas valía ir de una vez que en mitad de la noche. Prendió su cigarro y solo estaba iluminado por la luz de la lámpara del lavamanos. Escucho un ruido extraño, miro al techo y se dio cuenta de que el cable de la lámpara principal de baño empezó a moverse en círculo dando vueltas sobre si mismas, como si el cable del cual colgaban estuviese enredado. Se sorprendió bastante, ya que no había nada de viento, a pesar de todo no le dio importancia.

Justo al día siguiente notó que la pared del baño tenía una enorme rajadura, su abuela que también pasó por allí se estremeció al ver la enorme grieta. - Tarde o temprano esa pared tenía que aflojar y se partirá de nuevo. Dijo la abuela. Mario preguntó el por qué de la grieta y la abuela le comentó que la taparon cuando compraron la casa y que antiguamente la casa había servido de escondite para los revolucionarios de la época y que justo en el baño, una persona había sido colgada de una de las vigas de madera. Mario no dio importancia a lo que la abuela le contó, pero al llegar la noche todo fue diferente, la lluvia se hizo notar acompañada de rayos y truenos que iluminaban la casa con furia. Mario se metió al baño acompañado de una revista, y se dio cuenta que la lámpara se movía de nuevo tal como la otra noche, miro la ventana y esta estaba cerrada, la cortina del baño yacía inmóvil. Se quedo mirando fijamente, tratando de darse una explicación, cuando de pronto la luz se apago y un rayo ilumino el lugar mostrando la sombra del colgado sobre la grieta de la pared, moviéndose al son de la lámpara…

La próxima vez que visiten este lugar, pongan atención a sus paredes, puede ser que alguna grieta haya sido tapada antes de que ustedes llegaran a vivir ahí, o tal vez ya se muestre sobre las paredes, o en las lozas… tal vez las grietas les quieren anunciar algo.